21/12/06

Amistad

El océano trajo sal
y perfume de azares.

El océano trajo sol
y un idioma compartido.

17/12/06

Sed

cling
cling
cling

la gotita pequeña, reluciente y anónima

da de beber a un pasto
una hormiga
un caracol.

Yo
Yo
Yo

ser mínimo, único, anónimo

me doy de beber.

25/11/06

Remoto,
una tierra de aguas
mueve el constante círculo
de un diálogo mago.

20/11/06

12/11/06

Caminanta

Mirabas la tierra,
-gravedad doliente-
de mis pies consta
una superficie pura.

Mujer negra roja amarilla,
caminas la piel de tu niña futura.

9/11/06

Un abuelo que muere

en una habitación
sopla su fuego
reza su viento

Nuestros cuerpos aún son aliados del tiempo.

25/10/06

coplas

Han vaciado la luna de luz.

No han sido los gitanos
ni los argonautas.

La vasija se vacía.
Luego
se acristala
el agua

Luna vacía,
en la Tierra te llaman:
la baguala.

7/10/06

Cotidianas

Hoy es Sábado
aunque el barrio se apretuje en plazas
y Toro fuera fuera fuera
cabalga cabalga cabalga
las avenidas de Dios
los puestuchos de caños
las viejas sin manos
y el pan de las semillas.

4/10/06

cíclico

Un mar antiguo nace
de ceniza y labio:
carbón.
Dulce el vegetal amable
parte el sable:
y

acción.

25/9/06

Repetición

Yo repito actos
nacidos de un arroyo
sin naciente ni apertura.

El arroyo no es manso
su fisura es profunda
y la tierra, mi precipicio.

Ayer

Quiero explicar el por qué.
Las ciruelas eran rojas como la sangre.
La boca de la tortuga comía ciruelas.
Después ya no hubo tortuga.
Y el ciruelo murió.
Dijeron que estaba viejo y los viejos mueren.
La boca de la tortuga comía carne picada.
Nadie comió tortuga.
Jamás.
Ciruelas sí, mientras había.

18/9/06

Abrir

Abrir una ventana a la luz de la tarde
o al asalto de una noche de piel ligera
ese acto libertario
propio de ciudades
con ojos como casas en la penumbra aislada
y brisa de cemento solitario ambiguo
nos anuncia otro septiembre
de mares solidarios
y augurios de verano
en el vano antiguo.

15/9/06

La palma de tu mano

Escribo con la palma de tu mano.
Huella cejijunta
ahí
donde nadie ve
y nadie va.

Palma redonda y mansa
liviana y blanda
desdice mis palabras
cuando acaricia una blasfemia.

1/9/06

Chopos

Chopo alamero
álamo entero
madera del viento
que sopla hacia adentro:
brota tu rama
en el agua de un puente.

28/8/06

rejoice

Me decís:
pájaros volando en tu mirada.
No es mi culpa.
Esto es lo que te decía antes de que empezáramos el amor.
Y ahora que los pájaros han madurado
y abren las plumas como dedos
nos señalan
y esgrimen:
¡pájaros volando en tu mirada!

8/8/06

Los lagartos sí lloran

Por la cintura de mi mano
se desliza la lágrima fría del lagarto.
Vos, lagarto, futuro zapato.
Piel fría y suave que mi mano toca
y fresca se posa
en tu boca.

11/7/06

Lo que un dragón

Diremos que sí,
y que no
dijo el dragón.
Y rompió aguas
en el puente lacre del sol.
Y si el amanecer
se hace esponja de luz
diremos que fui yo.

Y el dragón rugió.
Y rugió rugió rugió.

2/7/06

Te mataron allí

Te mataron allí,
caballo cansado
doliente cicatriz, saliva en la boca.

Te mataron allí,
caballo desierto
jinete ausente en tu pupila abierta.

Nadie dijo nada
tu faz incendiada.
Nadie dijo nada
por llegar a buen puerto
(el silencio afilaba
antiguos entuertos).

Te mataron allí,
caballo moribundo
¿quién conjugaría en la tarde la brisa?

La brisa no clama por calles angostas
(la voz, la suerte,
la muerte y la vida).

30/6/06

Frío

Ancló sus garras en hojas
que bailan y bailan
al viento.

El invierno hiela la escarcha
espera su inmovilidad
pero es agua
solitaria

27/6/06

clarivigilia invernal

Viene sutil
el mar
lento el amor
el mar
reposando espesor
el mar
desprendiendo la luz
el mar.

Viene sutil
reposando la ola
murmullo en la barca
desprende racimos
de uvas los dedos
la sal de una lágrima
cortando la espera
de mareas rotas.

22/6/06

A la casa de árboles le sobra luz

Ramita de azul que durmió en mi bosque
me cuenta una historia
que plasmo
y no canto
en papel hojarasca.

21/6/06

Reveses

Recto el mundo derecho es.

Y mi
ran
do
por
la rendija

cuento las lágrimas de un cristal

desmadejado
.

16/6/06

Razón

Lógica razón,
la de los nombres ilustrados
no midas el tiempo con tu vara.
Pido a los astros que duren
lo que una muerte
lo que un cráter del volcán
o un juego de ajedrez.

14/6/06

De palomas

Piazza San Marcos, dos palomas copulan.

La una blanca
la otra azul
dura un segundo
y luego
la una se rasca el ala
la otra se come un piojo.

19/5/06

A modo de experimentación

Ayer: 19:05.
Una esquina.
Tres de Febrero y Juramento.
¿O es Zavalía?
Pasa un 65.
Pasa un 44.
Tres maniquíes me saludan. Uno es pelirojo.
Cuatro focos. Un taxi. Dobla.
Un hombre abraza a una mujer que lleva puesto un cuello de piel de conejo. Un niño pasa en una bicicleta roja.
Pasa un 63.
Pasa un 60 panamericana.
Hojas secas en la calle y pozos llenos de agua.
Frío en el agua.
Pasa un 113. Cartel rojo.
Los faroles de la plaza comienzan a brillar.
Pasa un ochenta. En una hora estará en Mataderos.
Pasa un 113. Por Gavilán.
Un repositor de Disco vuelve al supermercado arrastrando un carrito.
Pasa una mujer con impermeable un paraguas.
Pasa una boina con mujer.
Pasa una 60. En cuarenta minutos estará en Olivos.
Pasa un 44. En cuarenta minutos estará en Flores.
Un perro blanco lleva a un hombre a su casa.
La ciudad se viste de invierno.
Paulatinamente.

10/5/06

Descenso


Un vidalero termina una vidala en la cima de una montaña.
Después, desciende.
Descender cansa rodillas.
Pero si un pájaro se posa en su hombro
la travesía se hace más corta y la visión más saludable.

8/5/06

Es hora

¿Vamos a jugar por los senderos inventados?
¡Vamos!
Pero antes no te olvides de tu atado de ropa.
¿Cuál ropa?
La que te pondrás en el escenario al que te toque subirte.
¿Necesito ropa?
¡Claro! ¿O que te creías?
Ahora sí, vamos.
¿Y qué esa luz que nos enfoca?
Son los reflectores.
No, no, este no es nuestro escenario. Es más adelante.
Bueno, corramos entonces...
Juguemos a que el reflector no nos tiene que iluminar.
¡Dale!
¡Es una guerra, es una guerra!
Gritemos.
No, pará, ¿qué guerra?
Mejor caminemos hacia ese lugar oscuro del escenario. Debe haber una salida.
Sí, a otro escenario.
¿A otro más?
¿No lo ves ahí?
Uia, la gente nos aplaude.
¡Juguemos a que el reflector rojo no nos toca!
No, qué decis, yo no quiero jugar más.
Un límite, eso es lo que necesitamos.
Un borde, decís vos.
Un límite.
Pero ahí está el tercer escenario...
¿Será ese?
Me parece que es hora de que te pongas la ropa.
Sí.

6/5/06

Mujer de flores

Yo no soy la mujer de las flores secas.
Escuchen.
Cuando toco a una puerta les traigo pasto.
Una cesta me pesa
en el hombro redondo
Ay, de este hombro
donde todos sueñan
las más diversas
travesías urbanas
mares de niños
madres que claman,

claman, claman, claman

la calma.

Y mi mujer de los hombros
se sonríe en el fondo
y reza paciente
sobre su cesta futura.

27/4/06

La pluma azul

Esta pluma aunque azul
nunca será inocente.

Y sin embargo, la pluma
tiene una memoria extraña
pues cuando canta en mi mano diestra
me induce a estirar mi ojo
como el pájaro que avista
una tierra extranjera.

Olas viajeras

Me enfilo hacia el agua,
la playa se ahueca.

Me enfilo hacia el agua
que afila mis dedos
qué
ola viajera
sumergió mi verso

Me enfilo hacia el agua

24/4/06

Esbozo

Mi mano esboza tu cuerpo,
longilíneo
curvo bestial,
veloz
en suave pisar
febril
en su movimiento.

Es mundo de esferas
¡tobillos!
bizqueas los ojos cerrados
quiebra tu abrazo anidado
un trazo de cobre destino
y aun así,
¡brazo espada!
aún así,
te prefiero
rota, yo,
¡nunca lejos!
de tu cuerpo
(en sí mismo):
un deseo.

20/4/06

Aunque no la veamos, la Primavera.


Primavera niega a Otoño
su lugar en este podio
y en un trozo de mi ojo
hace nidos a su antojo
de pimpollos ¡ojo al piojo!

Sentido

Y ahora
que restituí los fragmentos
mi caleidoscopio se detuvo

Detengo la acción
(inmoderada acción)
para dormir una siesta
bajo el álamo de mi infancia.

13/3/06

Bosque

Los dientes definitivos aún tienen serruchito pues son nuevitos y cortan bien. ¿Ya tan chiquita y con ganas de escribir? Uno pensaría que con ese aire de libertad no tiene una pizca de intelectual. Cuando se zambulle en el agua o en el bosque virgen uno pensaría que será nadadora o caminante. Pero pasan los años y los bosques son talados y el agua contaminada. Los dientes se hacen lisitos y los traban aparatejos que corrigen y enderezan. Y ella crece entre artilugios de desesperanza que no comprende. Comienza a escribir por las noches a la luz de un velador. El hermano le pide que apague la luz pero ella le pide más tiempo. Entonces, el hermano se resigna y aprende a dormir con la luz prendida mientras ella, sumergida en un mundo de palabras, se desentiende del día. Y ahí descubre que los libros son los bosques y el estanque de agua perdido. Y promete que alguna vez escribirá su propio bosque, su propio estanque.

8/3/06

obviedades

Una vez escribí un cuento sobre un pajarito llamado Leo. Parece que yo había decidido que a Leo no le gustaba volar y andaba siempre en compañía de una lechuza muy amarga que lloraba la muerte de su tercer marido. Pero después algo pasaba y Leo salía en busca de aventuras y se tropezaba con la cabeza de una señorita muy bonita que se llamaba Emilia y pafate se enamoraba.
Típico.
Enamorarse de una cabeza.
Es tan típico que ni daba postearlo, realmente.