14/8/07

anoche

Saltar la valla en aras de algo:
lidiar con la sirena por la cerradura.

-Pero no estás en la mira.

Sellan mi boca con nieve brutal.
Me desvisto en el atelier del pintor. Deshojan mis ataduras otoñales y una única hoja marrón envuelve mi cintura.

-Pero no estás en la mira.

Píntenme la piel de azul.
Si el torbellino de los sueños es rojo coloquen su diadema en mi mano.

-Pero no estás en la mira.

Como era de esperar,
siento la humedad en mis espinas.

Soy yo la que mira,
soy yo la sirena,
soy yo el azul
y la última palabra.

No hay comentarios.: